Por Charles Sánchez, Director Ejecutivo FUNIN

A pesar de cumplirse un año de situación de crisis, aún no se visualiza un horizonte claro para una recuperación económica sostenible; observamos signos contundentes de un deterioro en la calidad de vida de muchos costarricenses (altas tasas de desempleo, deterioro en la calidad de la educación pública, agudizado por el trabajo a distancia o virtual), el confinamiento aunque hoy menos riguroso, también impacta negativamente en la salud mental de la población; pero no todo es negativo, nuestro sistema de salud ha logrado mantener espacios disponibles para la atención de todas las personas, fuimos de los primeros países del mundo en iniciar con la vacunación contra la COVID-19, por algunos meses (los más críticos de cierre y confinamiento), el Estado pudo establecer planes asistenciales para sectores más afectados por la pandemia.

Es por eso que en ACIB-FUNIN estamos convencidos que queremos mantener la organización próspera a pesar de la situación de crisis sanitaria, social y económica que afronta nuestro país, y el mundo. Trabajamos en la actualidad en dos nuevos convenios a nivel nacional, y en fortalecer los existentes a nivel internacional.

Para este 2021 nos enfocados en completar la fase de reclutamiento de los estudios RESPIRA y VALIDO ambos relacionados al tema COVID-19, así como al seguimiento de los ensayos clínicos ESCUDDO y PRIMAVERA; lo anterior implica esfuerzos adicionales para acatar las disposiciones sanitarias emitidas por el Ministerio de Salud y salvaguardar la salud de todos los participantes y nuestros colaboradores.

Nos proponemos avanzar en la implementación del código de buen gobierno, atender todos nuestros compromisos regulatorios referidos a la atención de participantes y consecución de objetivos científicos y de investigación y finalmente formular nuevas propuestas de investigación para asegurar la sostenibilidad en el largo plazo.

Seguros que nuestro trabajo se traduce en beneficios para la salud de cada participante; así como el empoderamiento a partir de la educación en salud y complementariamente en el avance del conocimiento científico mundial, sobre temas muy relevantes como la prevención de cáncer de cérvix y sobre la enfermedad COVID-19.

A nivel infraestructura interna ya completamos la ampliación de CIB-La Flor y nos encontramos en la remodelación del CIB-Rohrmoser; así como en la fase de búsqueda de financiamiento para la compra del CIB-Rohrmoser.

Aún transitamos por una situación de grave vulnerabilidad social y económica; sin embargo, ya es menos la espera para que las condiciones de desarrollo social y económico mejoren gradualmente. La reactivación económica tan esperada, debe iniciarse por cada uno de nosotros, innovando, emprendiendo, reinventándonos, trabajando responsablemente. Nuestro compromiso es heredar una Costa Rica mejor que la recibimos de nuestros padres, para lograrlo solo tenemos la certeza del ahora… empecemos ya.